Uno de los problemas más habituales que enfrentan los dueños de canes es que estos animales pueden convertirse en destructores de todo tipo de cosas en casa: zapatos, muebles, juguetes, cables, plantas… Te damos las claves para que descubras cómo evitar que tu perro muerda tus cosas.
Cómo evitar que tu perro muerda cosas
El perro puede morder las cosas por diversos motivos: se siente ansioso por pasar demasiado tiempo en soledad, está aburrido por falta de actividad, tiene demasiada energía acumulada y es muy hiperactivo o en casos más puntuales presenta dolor y molestias en las encías.
Lo mejor, tanto para solucionar el problema como para ayudar al perro a expresar sus conductas naturales, es redirigir la conducta hacia juguetes resistentes que tu perro pueda masticar sin causar problemas. Eso sí, hay que tener en cuenta el tamaño de los juguetes y evitar aquellos que puedan tragarse o con los que puedan atragantarse y, en algunos casos, el material del que están hechos puede ser tóxico.
Evitar objetos viejos
Algo fundamental es no dejarle objetos viejos o que los tengamos en desuso en casa, sobre todo, si tenemos otros iguales nuevos que no queremos que muerdan. Los perros no distinguen entre los objetos nuevos y viejos y es probable que los utilicen como mordedores.
Ejercicio
Otra de los consejos, no solo para no morder sino también para su salud en general es ejercitarlo diariamente bien con paseos o llevándolo a un parque donde pueda jugar con más perros. De esta forma el cansancio al llegar a casa apaciguará su ansiedad de morder todo lo que se encuentre.
Firmeza
Es muy importante también ser muy firmes a la hora de educarlo. Siempre con paciencia, pero si no se actúa con firmeza desde cachorro, la actitud de morder objetos le puede perdurar incluso cuando el perro sea adulto.
Juguetes
Un buen truco para enseñarle cuáles son los juguetes que puede morder es utilizar juguetes interactivos que pueden ser rellenados. Simplemente rellenándolos con comida apetitosa para el can, el adiestramiento se realiza automáticamente.
El perro empezará a masticar su juguete para conseguir la comida que hay dentro. Después de varias sesiones, tendrá una mayor probabilidad de masticar sus juguetes que de masticar otras cosas, porque masticar sus juguetes es reforzado con la comida.
Eso sí, con esta táctica, habrá que reducir la cantidad de comida diaria en función de la cantidad de comida que le pones en los juguetes, para evitar que engorde excesivamente.